En primer lugar, he de decir que sin leer el libro, hay dos cosas en la portada que son fundamentales para darte cuenta a primera vista de que puede resultar un bueno libro y son; el título y la ilustración, y más sabiendo que estas han hecho ganar a la escritora e ilustradora, Mabel Piérola, el Premio Internacional de Ilustraciones de la Fundación Santa María en el año 1997.
- Receptor:
Considero que el rango de edad para los destinatarios de este cuento podría darse entre los 4 y 6 años. Establezco este rasgo porque creo que es en torno a esta edad cuando los niños y niñas empiezan a observar el medio que les rodea y se hacen preguntas de cualquier tipo: por qué hay tantas personas en el mundo, por qué hay gente de color más oscura…Por lo tanto, es en esta edad cuando más lo pueden entender y más les puede ayudar.
Sabiendo, ahora, las formas de transmitir la literatura a los niños, se podría decir que este cuento es perfecto para hacer una narración con libro, ya que la historia del cuento es muy reflexiva. Y mientras la profesora lee el cuento los niños podrían ver las ilustraciones y pensar en cada una de ellas.
- Emisor:
El personaje del cuento que le da el mensaje al receptor o receptores es el niño protagonista, pues es este el que se pregunta por lo que se pregunta.
Además, creo importante decir que es fácil que los niños y niñas se identifiquen con el protagonista, con el emisor del cuento.
- Tema:
El tema del cuento son las preguntas que los niños y niñas se hacen sobre la vida. Sobre sus famosos porqués, sus dudas... es la curiosidad que tienen los niños al ir conociendo las cosas que rodean su día a día, por ello utilizan las preguntas como fuente de interés.
- Estructura:
La estructura del cuento es la ideal para los cuentos infantiles:
Planteamiento à Nudo acumulativo à Desenlace
La historia comienza con una duda que tiene el niño protagonista: “no sé dónde estuve antes de estar aquí”, continúa acumulando dudas y finaliza el cuento, aún con la duda, pero asegurando que le gusta todo lo que ve.
- Espacio y tiempo:
La historia sucede en la ciudad, en un espacio cercano al niño y por lo tanto conocido para él. El niño protagonista tiene su casa, va en autobús, ve gente a diario muy diferente...Todo esto hace que al niño no le suponga ningún problema entender el cuento.
En cuanto al tiempo, decir que es indefinido, en la obra, en ningún momento se dice cuando ocurre la historia. Podría estar escrita en pasado, en presente, incluso en el futuro.
- Ilustraciones:
Como ya he dicho anteriormente, tengo que recordar que las ilustraciones de este cuento han conseguido el Premio Internacional de Ilustración de la Fundación Santa María en el año 1997, lo cual ha permitido a la autora e ilustradora publicarlo en el mercado un año más tarde. Por este motivo, sería importante que los niños las pudieran ver.
Son imágenes sugerentes. No son estereotipadas, por lo que no pueden confundir al receptor, ni son realistas, ya que no imitan a la realidad, pero casi, ya que permiten entender que un niño es un niño y que un autobús es un autobús, lo cual es importante.
- Lenguaje:
La autora emplea la función poética para representar las dudas sobre la vida que acechan a los más pequeños, pero esta es tan sencilla que permite que se entienda perfectamente la historia.
Son frases sencillas, sin subordinadas, con un vocabulario muy sencillo y cercano al niño, lo cual le permite entender la historia.
- Valores y contravalores:
En este cuento, se da una actitud positiva de ver la realidad, de que aunque no se entienda el porqué de las cosas, hay que valorar todo lo que nos rodea.
Por último decir, que este libro sí que lo tendría en mi biblioteca de aula, por si a los niños y niñas les surge alguna de estas dudas, así pueden saber que no son los únicos y que lo que hay que hacer es valorar de forma positiva lo que les rodea.
Muy bien.
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